lunes, 27 de septiembre de 2010

EL PAIS DE LA NIEVE 96 (La desconocida y fantástica historia del pueblo Pijao)


"Ustedes no pueden atemorizar así a la princesa ni a mis amigos. ellos no les van a hacer nada. Acabaré con ustedes inmediatamente" dijo lanzándoseles encima para atraparlos con sus garras. Los ofidios levantaron las cabezas botándole chorros de veneno y candela que el cóndor esquivó con ágiles saltos. Se arrojó sobre ellas en una lucha infernal logrando agarrar a dos entre sus garfios que apretaba mas y mas estrangulándolas en el aire a donde había volado con fuerza potente y extraña. Mientras tanto otras serpientes salieron iracundas lanzando fuego y veneno. La voz ronca del buitre les preguntó volando sobre ellas "Donde está el pájaro de mil colores, donde está?" gritaba. Entonces las serpientes acosadas por tan gigantesco buitre, gritaron "El pájaro de mil colores quiso embrujarnos con su canto pero no lo consiguió jajajajajaja. Tuvo que huír por miedo a nuestro veneno y a nuestra candela. Pobre pajarillo" gritó una serpiente echando chispas por los ojos "Lo único que le quedó fue quedarse con un pirata en el barco viejo a la orilla del mar jajajajaja. No pudo con nosotras y huyó el muy cobarde. No logró hechizarnos con su canto jajajajajaja pobre pajarillo" y agacharon las cabezas hundiéndose ruidosas en el socavón. Millaray que había escuchado claramente a la culebra gritó "Entonces el pájaro no está aquí. Vámonos, vámonos ya y evitemos este peligro". El viento crecía queriendo llevarse todo. La polvareda fue mas espesa.
El dia era noche.
Cóndor volvió a hundir sus garras en el pozo atrapando otra serpiente que se estremecía en sus zarpas muriendo asfixiada en poco tiempo por la presión de esos garfios. La soltó cayendo en tierra con un sonido sordo.
Todos corrieron alejándose. Iban cogidos de las manos mirando insistentes atrás, no fuera que alguna de esas serpientes los persiguiera y destruyera. Entonces sin esperarlo, cóndor se descolgó parándose delante de ellos y bajando un ala. Los viajeros se agarraron subiendo rápidamente a sus costillas, acomodándose allí. Entonces el ave se levantó poderosa en la penumbra yéndose alta y veloz evitando los peligros de aquella región desconocida. "No pensé que fuéramos a encontrarnos con tan terribles monstruos" decía Millaray todavía temblorosa. "Para tener el pájaro de mil colores hay que pasar por muchas aventuras" respondió Inhimpitu respirando agitada y apretando su cetro del poder para calmarse. "Y que se hizo la Mojana?" preguntó Cajamarca penetrando su vista en la oscuridad. "Yo no me dí cuenta que se haría" dijo Millaray. "De pronto se la comieron las serpientes" "O de pronto huyó sin darnos cuenta" comentaron. "La Mojana se fue corriendo como una cabra perdiéndose en la oscuridad" dijo el cóndor aclarando las preguntas. "Ahhhhh, eso fue?. Tenemos que darle las gracias porque de alguna manera nos sirvió". "Si". "Ahora lo que haré será apuntar el cetro a la orilla del mar para ver si es cierto que el pájaro está en un barco viejo" dijo Inhimpitu entrecerrando los ojos y cubriéndose el cuello con un chal de colores. "Pero primero voy a reponerme de semejante susto". "Claro, primero tranquilicémonos" dijo Cajamarca acercándose a Millaray, acariciándole el cabello y la espalda.

No hay comentarios:

Publicar un comentario